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¿Sinergia o conflicto?

Abordar el complejo y amplio campo de la seguridad, desde (por ejemplo) la Seguridad Nacional, la Seguridad Humana, la Seguridad Pública, la Seguridad Ciudadana y otros enfoques del tema es de por sí difícil en este momento de dispersión conceptual y nominativa. Y si intentamos ver (o negar) el vínculo de este campo con el de desarrollo, la complejidad y las posiciones conceptuales, ideológicas y semánticas se disparan haciendo casi imposible encontrar un camino de convergencia.

Si a esta situación le agregamos la actual demanda vital de la Anticipación Estratégica Continua (AEC), el abordaje integral de esta temática ofrece enormes dificultades que es menester resolver lo más pronto posible.

INTRODUCCIÓN

Es común observar que, para algunos, la seguridad y el desarrollo son dos cosas distintas y casi sin vínculos, y en muchas situaciones o enfoque, en franca oposición.

Paralelamente aparece la visión opuesta, en la que el vínculo entre seguridad y desarrollo en total e indivisible, al extremo que se sostiene que sin seguridad no será posible lograr un desarrollo aceptable, y en el mismo sentido, sin desarrollo no será posible obtener los grados deseados de seguridad.

Además de estos opuestos enfoques, en América Latina observamos en la actualidad una dispersión conceptual y por momentos también nominativa al abordar el complejo campo de la seguridad. Por ejemplo, se debate la presunta primacía entre Seguridad Nacional y Defensa, y además se debate si una es parte de la otra, o son cosas independientes.

Al mismo tiempo, la discusión alrededor de términos como Orden Público, Seguridad Pública y Seguridad Ciudadana es larga, no resuelta y difusa. Y si agregamos los diversos enfoques y el rol (por lo menos conceptual) de la Seguridad Humana, entendemos que en realidad, abordamos un mismo tema pero desde ópticas, posiciones y conceptos muy diferentes, lo que hace casi imposible obtener resultados coherentes y sobre todo, consensuados.

Por último, vemos una lamentable ignorancia, falta de aplicación o negación de los principios y fundamentos de la Anticipación Estratégica Continua como base de la totalidad de las políticas, estrategias, planes y programas de prevención, de gestión de riesgos, de aprovechamiento de oportunidades y de conservación o mejoramiento del balance estratégico.

En este escrito intentaremos abordar al menos en parte esta temática, y es nuestro deseo aportar algunas ideas nuevas.

DESARROLLO

Es necesario hacer una aclaración en este momento para evitar confusiones y complejidades innecesarias. Nos referimos a que hemos realizado una intensa búsqueda en Internet y otra en bibliografía disponible de conceptualizaciones, definiciones y enfoques de varios términos (por ejemplo: Seguridad; Seguridad Nacional; Defensa; Defensa Nacional; Seguridad Humana; Seguridad Pública; Seguridad Ciudadana, otros) y encontramos una gran cantidad de aportes, definiciones, desarrollos temáticos y conceptuales y otras referencias.

De lo comentado, surge que evitaremos aquí esas citas encontradas, pues serían muy largas y por momentos tediosas, y avanzaremos con aportes generalizados o seleccionados a los fines de abordar el núcleo temático que intentamos desarrollar. Y lo haremos generándonos interrogantes, y buscando responderlos.

¿SEGURIDAD NACIONAL Y DEFENSA NACIONAL SON LO MISMO, O NO?

Vamos primero por una conceptualización de Seguridad Nacional. Para ello, hemos seleccionado la visión oficial de España. En su presentación, definen a la Seguridad Nacional como: “La Seguridad Nacional es la acción del Estado dirigida a proteger la libertad y el bienestar de sus ciudadanos, a garantizar la defensa de España y sus principios y valores constitucionales, así como contribuir junto a nuestros socios y aliados a la seguridad internacional en el cumplimiento de los compromisos asumidos”

Además, alrededor del gráfico que muestran, aparecen cuatro sentencias de máxima importancia:

  • Unidad de acción
  • Anticipación y prevención
  • Eficiencia y sostenibilidad en el uso de los recursos
  • Resiliencia o capacidad de resistencia y recuperación

En esta propuesta se advierte que, de alguna manera, se encuentran vinculados en su espíritu general, los tres temas que planteamos en el título de este escrito: seguridad, desarrollo y futuro. Esta es la razón por la que hemos seleccionado esta propuesta, aunque en otros casos las menciones no son tan abarcativas y por momentos son excluyentes entre los temas tomados.

Por otra parte, es conveniente recuperar el concepto de Seguridad que las Naciones Unidas, a través de su Asamblea General en 1986 definió como: “una situación en la que los Estados consideran a resguardo de peligro para que se produzca un ataque militar, presión política o coerción económica, obteniendo con ello libertad de acción para continuar con su propio desarrollo y progreso”. (Tello, 2017)

En el caso de los conceptos de Defensa Nacional, mostramos algunos planteos que se diferencian entre sí:

El enfoque actual de Perú: “Defensa Nacional es el conjunto de previsiones y acciones que el gobierno genera y ejecuta permanentemente para lograr la Seguridad Nacional y alcanzar sus objetivos que compromete la participación de todos los peruanos, y a los extranjeros residentes en el país, sin distinción de raza, credo, edad y sexo”.

En Argentina según Tello (Tello, 2017) la Defensa nacional es “la acción coordinada de todas las fuerzas de la Nación para la solución de aquellos conflictos que requieran el empleo de las Fuerzas Armadas, en forma disuasiva o efectiva para enfrentar agresiones de origen externo”.

Agregamos aquí el concepto de Defensa Nacional provisto por Wikipedia, pues su contenido, ampliamente abarcativo, marca diversas concepciones (ver sus enfoques realista y neorrealista) y la ampliación conceptual de su último párrafo:

“La defensa nacional o la política de defensa es un conjunto de actividades políticas y militares que desarrollan los estados nación modernos, para evitar o rechazar los ataques militares que eventualmente pudieran realizar otros estados-nación (enfoque realista) o amenazas que puedan venir de diferentes grupos de poder, como grupos terroristas, empresas transnacionales, movimientos sociales, organizaciones no gubernamentales (enfoque neorrealista). Las actividades más habitualmente relacionadas con la defensa nacional son las que están referidas a las fuerzas armadas y la guerra; sin embargo otras actividades y políticas están íntimamente relacionadas con la defensa nacional, como la investigación y desarrollo de tecnología de punta, la provisión de materias primas estratégicas y alimentos, la industria básica y la ocupación del territorio”.

En definitiva, podríamos concluir que la Defensa Nacional es parte fundamental de la Seguridad Nacional, y a la vez visualizar que el alcance de la Defensa Nacional es diferente en distintos países. En ese sentido, pareciera que la última propuesta presentada es la más completa y abarcativa, y mejor orientada a las problemáticas que se viven hoy, y que podrán vivirse en el futuro.

¿SEGURIDAD NACIONAL ESTÁ VINCULADA CON EL DESARROLLO, O NO?

En el año 2000 se fijaron los (primeros) ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODS) que debían estar cumplidos en 2015. El 25 de septiembre de ese año la ONU replanteó totalmente el tema, y se fijaron los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030.

Sin embargo, ninguno de los ODS tiene vínculo conceptual ni operativo con la Seguridad Nacional ni con la Defensa. Parecería que ambos temas son totalmente independientes, desde esta concepción.

Y este no es el único caso. Por ejemplo el ILPES (Instituto Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales) de CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) de ONU, se dedica a múltiples temas de desarrollo, pero no aborda temas de seguridad.

Pero por el contrario, es bueno recoger ideas de la propuesta de Seguridad Nacional de España. La mención acerca de “anticipación y prevención” que vincula a Seguridad y Defensa Nacionales con el futuro, como también las menciones a la “Unidad de acción” y a la “Eficiencia y sostenibilidad en el uso de los recursos” implícitamente estarían vinculando a la Seguridad Nacional con el Desarrollo.

En otras palabras, debe aceptarse que los conceptos de Seguridad Nacional (incluida la Defensa Nacional) forma un sistema interactivo indivisible con el Desarrollo, y que ambos requieren permanentemente una profunda e inteligente penetración en el futuro, para adelantar la detección de riesgos, oportunidades y aparición de eventos de ruptura.

Aparece de esta manera el desafío de trabajar de inmediato en un esfuerzo de coherencia e integración de estos temas, cada uno con los conceptos apropiados y consolidados y con sus alcances perfectamente definidos. Dura tarea por cierto, pero imprescindible.

CONCLUSIONES

Hablamos de temas altamente vitales y sensibles para cualquier país. Su Seguridad Nacional, su Seguridad humana, su Seguridad ciudadana, su Defensa, su Desarrollo en todos los campos. Y entonces, deberíamos hacernos una pregunta cuasi obvia: ¿Cuál es el grado y la profundidad de Anticipación Estratégica Continua (AEC) en los cuatro tiempos estratégicos básicos (cortísimo, corto, mediano y largo plazos) y cuál es la profundidad de los análisis efectuados en los campos mencionados en dichos tiempo?

Y surge otra pregunta, cuasi conclusiva por decantación: ¿Conocemos ya los riesgos y oportunidades que los distintos futuros posibles podrían generar de configurarse como eventos?

Nuestras conclusiones están directamente vinculadas a las respuestas que se obtengan de estos interrogantes, y al diseño de las acciones estratégicas emergentes para lograr los niveles adecuados de AEC.

Esperamos haber aportado, al menos, buenos interrogantes.

Fuente Revista Militar Armas y re-publicado bajo licencia Commons. Para ver el artículo original haz clic aquí

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